En el mes de abril, como es habitual, desde Cáritas Argentina presentamos nuestra rendición de cuentas en la que informamos sobre el destino de las donaciones recibidas durante el año pasado. El 2020 ha sido un año muy difícil para todos, con una enorme crisis que golpeó especialmente a los sectores más vulnerables. No obstante, la solidaridad y el esfuerzo de los argentinos permitió que se pudiera desplegar una enorme ayuda para más de 3,2 millones de personas y distribuir más de 10.400.000 kg. de alimentos, entre otras acciones.
Sobre esta asistencia extraordinaria en la pandemia hemos informado oportunamente, y se puede encontrar el último resumen en nuestro sitio web, publicado en marzo [clic aquí]
En cambio, el informe que presentamos se refiere también a los programas de promoción humana que Cáritas Argentina desarrolla habitualmente durante el año y que, a pesar de las duras limitaciones de la emergencia, no se discontinuaron.
Se puede acceder al mismo haciendo [clic aquí]
Algunos números
En 2020 Cáritas aplicó $ 516.977.512,76 a programas relacionados con la educación, primera infancia, abordaje de las adicciones, economía social y solidaria, vivienda, desarrollo institucional y programas diocesanos llevados adelante en las 24 provincias.
A través de un amplio trabajo articulado en red con más de 40 instituciones de los ámbitos privado, público (nacional, provincial, municipal), académico y organizaciones de la sociedad civil, estos programas contribuyeron al desarrollo y promoción de 127.913 destinatarios, incidiendo positivamente también, de manera indirecta, en otros cientos de miles de personas que conforman sus grupos familiares y sus comunidades.
El dinero recaudado procede de fuentes diversas: contribuciones de donantes particulares (28%), empresas y organizaciones (22%), subsidios del Estado para programas sociales específicos (31%), cooperación internacional (8%) algunos legados personales (1%), entre otros. Esta contabilidad no incluye las donaciones recibidas a través de servicios o en especie, que muchas empresas nos brindan con fines diversos, y que son muy valiosas.
El rostro de cada número
Nuestra principal preocupación en Cáritas es la promoción humana, para lo cual procuramos generar y dar respuestas integrales a las problemáticas de la pobreza desde los valores de la dignidad, la justicia y la solidaridad. Por esta razón, además de atender las situaciones de emergencia, nuestra labor se orienta a la formación, capacitación y acompañamiento de personas y comunidades, brindándoles oportunidades para que sean protagonistas de sus propias historias de superación. Un repaso rápido de esta rendición permite visualizar que temáticas tan importantes como la educación, el cuidado de la infancia, la promoción del trabajo, la autoconstrucción del hogar o el acompañamiento de las adicciones están siempre presente en nuestra lista de tareas.
Porque, para nosotros, detrás de los números fríos hay personas, hay rostros que conocemos con nombre y apellido, hay familias, comunidades que trabajan, niños que sueñan, madres que sufren, padres con ansia de futuro, abuelos que regalan sabiduría, excluidos que esperan. Por eso, al leer esta nota, te invitamos a humanizar lo que representa cada número, a tratar de ver imaginariamente los rostros de las personas que se esconden detrás de cada acción de Cáritas y, de este modo, llegar a comprender el impacto profundo que llega a tener tu donación en la vida de muchas personas. En nombre de todas ellas te decimos: gracias por ayudarnos a transformar tantas vidas.
