Quiénes somos

Pastoral Caritativa

Cáritas es amor en obras: nuestro servicio y nuestras acciones se inspiran en el amor a Dios y al prójimo. Buscando la verdadera dignificación del hombre, Cáritas se centra en tres momentos claves para llevar adelante su misión:

Asistencia: Forma de animar la caridad que consiste en dar respuestas a las necesidades mínimas o situaciones de emergencia de las comunidades más pobres.

El desafío es no solamente dar de comer o abrigar sino acompañar a las familias y ser puerta de entrada para escuchar, contener, organizar y planificar tareas que estimulen la promoción humana.

Promoción humana: Busca modificar, mejorar y suscitar cambios que mejoren las condiciones de vida de los más pobres. Requiere incorporar a las personas en la búsqueda de soluciones a sus problemas junto con otros.

Es un proceso sustentable a largo plazo, que requiere planificación con la persona y la comunidad. Se debe propiciar un proceso de desarrollo humano integral que fomente el desarrollo conjunto de cualidades, capacidades, posibilidades y recursos de las personas, para que puedan actuar de manera autónoma y comprometida y ser protagonistas activos en la construcción del bien común de la comunidad a la que pertenecen.

Por ello son tareas fundamentales y complementarias la formación, la organización y la promoción comunitaria.

Caridad transformadora: La Iglesia desde la búsqueda de un mundo de hermanos, apunta a transformar las estructuras injustas de pecado y producir cambios en toda la sociedad para acercarnos al Proyecto de Dios.

Promover la animación de la caridad transformadora es impulsar la reflexión y la formación de la conciencia social, acompañando acciones que permitan pasar de habitantes a ciudadanos.

Nuestra misión

Animar, coordinar y organizar la pastoral caritativa de la Iglesia en Argentina, procurando generar y dar respuestas integrales a las problemáticas de la pobreza desde los valores de la dignidad, la justicia y la solidaridad. Evangelizar las relaciones sociales, promoviendo la conciencia solidaria e invitando a la sociedad toda a encontrarse en la acción de compartir y así construir una realidad más justa y en paz.

Nuestra visión

La visión de Cáritas es un mundo que es reflejo del Reino de Dios:

  • Donde prevalecen la justicia, la paz, la libertad y la solidaridad;
  • En el que la dignidad de la persona humana, hecha a imagen de Dios, es lo más importante;
  • Donde no existe exclusión, discriminación, ni pobreza que deshumanicen;
  • Donde los bienes de la Tierra son compartidos entre todos;
  • Donde se respeta y cuida todo lo creado, por el bien común de las generaciones futuras;
  • En el que todas las personas, sobre todo las más pobres, marginadas y oprimidas, como parte de la comunidad mundial, tienen esperanza y están habilitadas a llegar a la plenitud de su humanidad.

Orientaciones pastorales

Según el estatuto de Cáritas, en Asamblea Federal se proclaman las Orientaciones Pastorales que marcan el rumbo de la tarea que Cáritas lleva adelante en todo el país. En el marco de la XV Asamblea y XIX Encuentro Nacional que se desarrolló en 2018 en Tanti, Córdoba, se proclamaron las siguientes orientaciones para el trabajo de Cáritas

Cuidar la vida

Alentamos el cuidado de la vida por su valor sagrado y su dignidad, con especial dedicación a los más vulnerables, como condición primordial para favorecer relaciones positivas entre las personas.

Cuidar la familia

Favorecemos el desarrollo de las familias como primera comunidad de amor donde se recibe la vida y se la proyecta a la comunidad, acogiendo todas las expresiones que actualmente adoptan.

Cuidar la comunidad

Impulsamos el crecimiento de las esperanzas e iniciativas de las comunidades y la mejora de sus condiciones de vida, desarrollando el sentido de ciudadanía y la posibilidad de ejercicio de derechos.

Cuidar la casa común

Alentamos una economía al servicio del ser humano y al cuidado de la casa común, promoviendo y defendiendo modos de trabajo digno que favorezcan la construcción de un mundo sostenible e inclusivo.

Cuidar nuestra misión

Queremos ser fieles a la misión de Cáritas, asumiendo el cuidado de los agentes pastorales que la construimos día a día, ampliando nuestros equipos y fortaleciendo nuestra mística y formación.

Historia

La labor de Cáritas en el país comenzó a mediados de la década de 1950. Desde entonces, ciertas características fueron forjando una identidad particular, como el amplio voluntariado y la búsqueda permanente de procesos sustentables en el acompañamiento a las comunidades más vulnerables.

Otro aspecto que también nos distingue es nuestra presencia física en cada rincón del país, con base en las parroquias. En la pequeña capilla del pueblito más lejano, hoy es posible encontrar un grupo de voluntarios de Cáritas que conoce a todos los vecinos por su nombre y sabe de sus necesidades y preocupaciones, porque también es parte de la comunidad.

Con el correr de los años, Cáritas Argentina fue creciendo en estructura y organización. Las diócesis se sumaron a la iniciativa, constituyendo sus sedes, congregando voluntarios en las parroquias y procurando fondos para sostener la incesante tarea.

En 1962 comenzaron a reunirse los secretariados diocesanos que se iban estableciendo y en 1969 se realizó el Primer Encuentro Nacional de Cáritas en Villa Carlos Paz (Córdoba). El principal objetivo del mismo fue responder “qué es Cáritas en la Argentina, qué debe ser Cáritas en la Argentina y cómo hacerlo”.

Promediando los años setenta, gran parte de nuestras energías estuvieron destinadas a la ayuda inmediata, especialmente a través de la donación de alimentos, medicamentos y ropa, como también sucedía en la mayoría de las Cáritas ya existentes en América Latina.

Si bien esta labor nunca se abandonó por completo, nuestra prioridad se fue transformando en los ’80, cuando comenzamos a transitar un camino orientado hacia la promoción humana. El objetivo se centró en buscar un mayor protagonismo de quienes participan de los distintos proyectos, favoreciendo así su propio desarrollo y el de la comunidad en su conjunto.

En este contexto, en 1986 la Conferencia Episcopal aprobó el actual Estatuto de Cáritas Argentina, como organismo encargado de coordinar la obra caritativa oficial de la Iglesia. Siempre en sintonía con la mirada promocional, fuimos creando nuevas áreas de trabajo, atentos a las exigencias que la realidad del país iba mostrando como prioritarias en nuestra misión. Por ejemplo, como respuesta a las inundaciones provocadas por el fenómeno del Niño en el Nordeste argentino, en 1998 iniciamos la campaña “Reconstruir con Esperanza”. Gracias a esta experiencia, un año después se firmó el Convenio Marco entre el Ministerio de Planificación y Cáritas Argentina, dando inicio al Programa de Construcción de Viviendas mediante el modelo de Autoconstrucción, Ayuda Mutua y Asistencia Técnica.

Desde esta constante premisa de brindar respuestas a las problemáticas más acuciantes que derivan de la pobreza y la exclusión, en 2007 nació el Plan Emaús de Inclusión Educativa, en 2013 se incorporó el área de Economía Social y Solidaria y en 2016 se sumó, por un lado, el programa de Primera Infancia y, por el otro, se creó el área de Abordaje Pastoral y Comunitario de las Adicciones (Apyca).

En casi siete décadas, hemos brindado respuestas concretas a las necesidades más urgentes de las comunidades vulnerables. No sólo desde los proyectos y programas antes mencionados, sino también haciendo frente a las grandes crisis y acontecimientos de nuestra historia, como las trágicas emergencias climáticas, las crisis económicas y sociales y más recientemente, la pandemia de Covid-19, donde la asistencia alcanzó a 3.500.000 personas.

Hoy seguimos trabajando activamente en las 66 diócesis que conforman la Iglesia Argentina. Gracias al compromiso solidario de toda la sociedad y al esfuerzo cotidiano de más de 40 mil voluntarios, canalizamos nuestra acción a través de más de 3.500 parroquias, capillas y centros misionales.

Organización

La presencia de Cáritas en todo el país permite el intercambio, la coordinación y el trabajo articulado de sus miembros y se organiza en los siguientes niveles de intervención:

CÁRITAS PARROQUIALES
Alrededor de 3.500 parroquias, capillas y centros misionales, animan y coordinan en todo el país la tarea de Cáritas en su ámbito local. Su acción llega de manera directa a las familias más pobres de cada comunidad.

CÁRITAS DIOCESANAS
Animan, articulan y coordinan la tarea de las Cáritas parroquiales y llevan adelante programas y proyectos de asistencia y promoción a nivel diocesano y regional. Cáritas está presente en las 67 diócesis del país. Están presididas por los obispos diocesanos.

Las Cáritas diocesanas están agrupadas en 8 regiones de acuerdo a su disposición geográfica, promoviendo el intercambio de experiencias y articulación de proyectos comunes, así como la cooperación en el estudio y en la coordinación de la solución de los problemas vinculados al servicio de la caridad que se planteen en el ámbito de la región.

LAS REGIONES QUE INTEGRAN CÁRITAS ARGENTINA SON:
NOA (Noroeste Argentino), NEA (Noreste Argentino), Cuyo, Centro, Litoral, Platense, Buenos Aires y Patagonia.

CÁRITAS NACIONAL
Anima y apoya la acción de las Cáritas diocesanas articulando y coordinando recursos, programas y esfuerzos mediante el acompañamiento, la asistencia técnica, la capacitación y el monitoreo de sus equipos de trabajo.

     

AUTORIDADES DE CÁRITAS ARGENTINA (Trienio 2024-2027)

Comisión episcopal de Cáritas

Presidente: Mons. Gustavo Carrara

Miembros de la comisión episcopal: Mons. Roberto Álvarez y Mons. Enrique Martínez Ossola

Comisión nacional

Director nacional: Luciano Ojea Quintana

Vicedirectora: Paula Porce

Tesorero: Gerardo Schattenhofer

Vocales: P. Fabián Monte, Emilio Insaurraga,  Diego Quiroga y Agustina Bonetto

Directora ejecutiva

Sofía Zadara